Seb.
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¡Buenos días, Don Hilarión!
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Hil.
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¡Buenos días, Don Sebastián!
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Seb.
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Le veo a usted preocupado. ¿Le pasa algo?’
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Hil.
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¡Qué observador es usted, Don Hilarión! Vengo con la
cabeza agachá; la vista, a los
adoquines; la musculatura facial, encogía,
y las manos, a la espalda, como Napoléon…¿Y me pregunta que si me pasa algo?
¡¡¡Pues, claro!!!
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Seb.
|
Y debe ser gordo, porque está usted más tenso que la
prima.
|
Hil.
|
¿Qué prima?
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Seb.
|
La de la guitarra, hombre, la de la guitarra.
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Hil.
|
No se burle, usted, hágame el favor.
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Seb.
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De acuerdo, de acuerdo. Sólo pretendía relajar el
encuentro, suavizar la tensión, distender nuestra charla.
Pero, dígame, amigo mío. ¿Puede saberse qué es eso tan
grave que le preocupa?
|
Hil.
|
Verá usted, Don Sebastián. Tengo un problema grave,
bastante grave.
Esta mañana, a eso del mediodía, minuto más, minuto menos,
entró en la botica la
Encarna; ya sabe usted,
|
Seb.
|
¿La
Encarna? Pues ahora mismo no caigo.
|
Hil.
|
Sí, hombre, sí. la Encarna.
La que vive dos casas por encima de la suya, aunque debía
trasladarse a la calle de Alcalá, porque está como para exponerla en Bellas
Artes.
|
Un blog para los amantes y amigos de la Zarzuela
Anécdotas, curiosidades, comentarios, efemérides, libros, discos... y algunas consideraciones sobre otras músicas.
jueves, 28 de noviembre de 2013
ZARZUELA AL ALCANCE DE LOS NIÑOS
viernes, 22 de noviembre de 2013
CALLES PARA UN GENERO LÍRICO
LA
ZARZUELA
Nuestro género musical está presente en la toponimia de muchas de
nuestras ciudades que tienen calles y plazas con este nombre. No faltan,
tampoco, urbanizaciones que lo llevan.
La razón es obvia: el nombre de este género lírico propiamente español
nació en un pabellón de caza, en el monte de El Pardo madrileño, donde Felipe
IV descansaba después de una jornada cinegética por la zona. El edificio estaba
en un lugar lleno de zarzas; de ahí el nombre de “zarzuela”.
Para entretener las noches, cómicos madrileños, se acercaban por allí
para ofrecer loo que dieron en llamar “fiestas de zarzuela”, que no eran más
que espectáculos variados: comedias, canciones, bailes …. Y allí, y así, nacio la Zarzuela.
Con el nombre de Avenida de la Zarzuela , encontramos la zarzuela en:
- Madrid capital,
- Rivas-Urbanizaciones, y
- Rivas-Vaciamadrid.
Hay Plaza de la Zarzuela en:
- Torrejón de Ardoz, de Madrid.
- Abaran, de Murcia.
- Alcalá de Guadaira, Dos hermanas y Écija, de Sevilla.
- Toledo capital y Villacañas, de Toledo.
Un Paseo de la
Zarzuela tiene
- Villaseca de la
Sagra. de Toledo.
Calle de la Zarzuela la encontramos
en muchos lugares de nuestra geografía:
- Elda y Orihuela, de Alicante.
- El Ejido, de Almería.
- Almendralejo, de Bajajoz.
- Chiclana de la
Frontera, San Fernando, Zahara de los Atunes, de Cádiz.
- Torrelavega, de Cantabria.
- Montilla (con Zarzuela Alta y Zarzuela Baja), y Zagrilla lta, de
Córdoba.
- Montilla del Palancar, Sotos y Villaconejos de Trabaque, de Cuenca.
- Algarinejo (como Zarzuela Baja) y Campocamara, de Córdoba.
- Silos de Calañas, de Huelva.
- Santisteban del Puerto, de Jaén.
- Anguciana, de La Rioja.
- Las Palmas de Gran Canaria, de Las Palmas.
- Trobajo del Camino, de León.
- Alcalá de Henares, Fuenlabrada, Fuente el Saz de Jarama, Getafe,
Ribajetada y Valdolmos, de Madrid.
- Benamocarra y Vélez-Málaga, de Málaga.
- Navalmanzano, Navas de San Antonio, de Segovia.
- Toledo capital y Villaseca de la Sagra, de Toledo.
- Lituenigo, de Zaragoza.
El nombre de Camino de la
Zarzuela, está presente en:
- Madrid capital, Móstoles,Navalcarnero, Valdeolmos y Villaviciosa de
Odón, de Madrid.
- Segovia capital.
- Tarazona, de Zaragoza.
Finca la Zarzuela, aparece en
- Villoruela, de Salamanca
- La Puebla
de Montalbán, de Toledo.
Un Paraje de la
Zarzuela, puede encontrarse en
- Calasparra, de Murcia.
En Torrejón de Ardoz, existe un Polígono de la Zarzuela y en Cobisa
(Toledo) una Urbanización La Zarzuela.
No falta, incluso, el topónimo Arroyo de la Zarzuela, lo hemos
encontrado en
Cádiz y Córdoba.
Hay, por último, algún pueblo que lleva el nombre de zarzuela. Nos
ocuparemos de ellos en otra entrada.
Solicitamos su colaboración, para corregir posibles errores o
aumentar el número de estas calles zarzueleras. Muchas gracias.
martes, 19 de noviembre de 2013
ZARZUELAS CON AÑADIDOS
Escenografía del Teatro de la Zarzuela 2013 |
Hil.
|
¡Buenos días, amigo mío!
|
Seb.
|
¡Buenos días, nos de Dios a todos!
|
Hil.
|
A todos, a todos … No sé. A algunos, a lo mejor, tenía que
darles un pescozón.
|
Seb.
|
¿Y eso? ¿Cómo viene usted tan poco solidario con el género
humano?
|
Hil.
|
Pues, la verdad, es que he dicho lo dicho, sin mucho
convencimiento. Pero ..
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Seb.
|
Pero es que algo le reconcome los intestinos, o sea le
raspa las tripas.
|
Hil.
|
Pues sí.
|
Seb.
|
¿Y puede saberse?
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Hil.
|
Pues que me he enterado de que a una zarzuela cortita le
han añadido música que originalmente no tiene.
|
Seb.
|
¡Ay, Don Hilarión! ¡Siempre andamos con lo del tamaño! ¿Y
de qué obra se trata, si no es un secreto?
|
Hil.
|
Pues de la nueva, de Los
amores de la Inés.
|
Seb.
|
¿La de Falla? ¿La que ha estado más de cien años
durmiendo?
|
Hil.
|
Sí señor. Esa.
|
Seb.
|
Hombre, a lo mejor es que después de un siglo en formol,
le convenía un arreglo para presentarla en sociedad.
|
Hil.
|
No lo sé, pero a mí estas prácticas me causan inquietud.
Porque, dígame usted, ¿tiene sentido que se estén realizando exigentes y
exhaustivas revisiones musicológicas y luego, al llevar las obras a la
escena, se introduzcan cambios o añadidos? ¿Se está alterando la naturaleza
más íntima de las obra? ¿Por qué y para qué se cambian o se añaden músicas o
textos? ¿Qué es eso de “adaptar” las obras a nuestro tiempo? ¿Busca alguien
convertirse en coautor, con lo que eso significa?
|
Seb.
|
Plantea usted más interrogantes que el examen de conducir,
pero me temo que no tienen una respuesta definitiva.
A mí, como a usted, en principio estas prácticas no me
entusiasman. Hace muchos años, un gran director de orquesta, hablando de esto
de las versiones, me dijo: “Si lo pruebas, el original es lo mejor”. Hablaba
de música sinfónica, pero creo que viene a ser lo mismo.
Pero quizá haya que dar un margen de confianza. esperar a
ver los resultados. A lo mejor esos añadidos no se notan, incluso, puede que
queden bien.
|
Hil.
|
Hombre, en este caso, además, seguro que la gente ni se
entera. Porque, verá usted: la música que se ha añadido es del propio Falla,
obras de la misma época más o menos y poco conocidas por la mayoría del
público. Además, como la música original de Los amores no la conoce nadie, salvo, claro está, los que la
están haciendo ahora, pues no podemos saber si nos dan chicha o limoná. ¿Me
entiende usted?.
|
Seb.
|
¡Claro que sí! ¡Cómo no le voy a entender!
|
Hil.
|
Pero, déjeme que siga y le conteste a esa idea de si queda
bien el añadido o no. Mire usted, puede que el espectáculo sea bueno, bien
hecho, bien cantado, bien dicho, bien interpretado … Bien, bien, vamos. Pero
no es Los amores … En todo caso
será Los amores de la Inés … Plus.
|
Seb.
|
Hombre, Don Hilarión. En rigor, no le falta a usted razón,
pero a mí me parece que no hay que llevar las cosas al extremo. Ni por los
que hacen estos arreglos, ni por los que escuchamos. Demos tiempo al tiempo; vayamos al teatro y
juzguemos después.
|
Hil.
|
Ya, ya. Quizá tenga usted razón. Pero es que esto … no
acaba de convencerme. Pienso en lo que habría dicho –y hecho- don Manuel de
Falla en este caso. Él que era muy exigente con sus cosas, no hay más que
recordar las peleas que tuvo con un franchute cuando estrenó La vida breve en París porque el
susodicho no cumplía, es-tric-ta-men-te, lo firmado.
|
Seb.
|
Es verdad. ¿Qué habría hecho? Era exigente… pero .. ¿sabe
usted que estrenó su Inés con una
orquesta sin oboe, con una viola y un único contrabajo que estaba siempre en
el bar de la esquina?.
|
Hil.
|
¡Qué fino es usted, Don Sebastián! ¡Cómo se nota que es un
comercial! Acaba usted de darme, sibilinamente, la puntilla. Ahora tengo más
dudas que antes.
|
Seb.
|
No se martirice, querido amigo. Vaya usted al teatro, vea
y escuche. Si le gusta, aplauda y si no, márchese a casa, pero no se haga
mala sangre.
|
domingo, 17 de noviembre de 2013
CALLEJERO DE LA ZARZUELA - LA DOLOROSA
Zarzuela de costumbres aragonesas en dos actos, escrita por
Juan José Lorente, con música de José Serrano. Se estrenó el 23 de mayo de
1930, en el Teatro Apolo, de Valencia.
La Dolorosa es una de nuestras grandes zarzuelas ,
por la unidad y la intensidad de todos
los fragmentos: el clima uniforme de todo el argumento y la belleza de las
melodías.
Cualquiera de sus números musicales satisface a quien lo
escucha, pero hemos destacamos el imponente “Relato de Rafael” (“La roca fría
del Calvario”), música impactante, verista para algunos, que se escucha
inmediatamente después del preludio. Después, el “Dueto cómico” entre Perico y
Nicasia (Ya verás cuando me ponga”), magnífico en sí mismo y sorprendente por
el momento en que aparece. Y, continuando con el contraste, la encantadora
“Nana” (“Duerme mi tesoro”) que entona Dolores cerrando el primer acto. En el segundo cuatro fragmentos: el tenso
“Dúo de Dolores y Rafael (“Déjame besar tu mano generosa”), la reflexión del
prior del convento sobre la situación de Rafael (“Me a mucho que pensar”), el
intermedio y el cuadro final (“Dejo tu sombra santa mansión”).
LA DOLOROSA tiene su calle en Madrid, en la Ciudad de los Ángeles.
Solicitamos su colaboración, para
corregirnos si hemos cometido errores y aumentar el número de estas calles
zarzueleras si hemos omitido alguna.
sábado, 16 de noviembre de 2013
EL VOTO
Pensamientos de un
barbero.
Acaba de salir el Señor Romualdo,
el frutero del barrio, que viene a arreglarse el pelo desde que abrí el
establecimiento. Es un buen hombre, sencillo, cabal, más bien conservador,
aunque desde que le conozco, ha dado algunos pasos adelante en sus ideas,
aunque muy tranquilamente y sin prisas.
Cuando se sienta en la silla,
charlamos de las más variadas cosas, de lo dura que está la vida en estos
tiempos, de los toros, de lo bien que se conservan algunas señoras, y … de
cosas que llamamos intrascendentes. En la barbería he conseguido, no sin
esfuerzo y aún a costa de algún cliente, imponer una norma: no se habla de
política ni de religión. Yo tengo mis ideas y convicciones, ¡faltaría más!,
mucha gente las conoce porque no las oculto, pero dentro de la peluquería …
cortar y peinar.
El Romualdo me ha sacado el tema
de los votos y me ha pedido consejo. Le he dicho lo único que podía decirle,
que fuera a votar y que eligiera lo que le pareciera. Y nada más.
El voto es un derecho y un deber,
le he recordado. El hombre ha puesto
cara rara porque le parecía que eso de derecho y deber, al mismo tiempo, era
una contradicción.
Se lo tratado de explicar
sencillamente. Derecho supone posibilidad, facultad para hacer algo o exigir
algo, bajo ciertas condiciones. Usted, le he dicho, tiene derecho a elegir el
alcalde de su pueblo si es mayor de edad y reside en él, pero no tiene derecho
a elegir al del pueblo de al lado. Deber es lo mismo que obligación; hay que
hacer algo, de lo contrario se comete una falta.
Ojo, le he insistido, hay que
votar, pero puede usted votar lo que quiera, lo que le parezca mejor, o menos
malo.
El Romualdo me ha mirado a través
del espejo, ha guardado unos segundos de silencio y ha dicho: Sigo sin entenderle:
un derecho puedo ejercerlo o no, un deber hay que cumplirlo. Y ha añadido: me
parece que esa frase grandilocuente de que el voto es un derecho y un deber, en
el fondo, está vacía. Como otras muchas que dicen los políticos para hacernos
creer en cosas grandes e importantes que luego no lo son. Frases vanas.
¡Piénselo, Lamparilla!
Me ha pagado y se ha marchado.
Con el dinero en la mano me he
dicho, para mis adentros. Yo tengo derecho a cobrar mi trabajo; el Romualdo
tiene el deber de pagarme. Está claro, ¡pero las dos cosas al mismo tiempo! …
Lamparilla
(Todo esto es
consecuencia de que no sólo de zarzuelerías vive el hombre).
domingo, 10 de noviembre de 2013
PROMOCIONAR LA ZARZUELA
Seb.
|
Definitivamente, Don Hilarión, creo llegado el momento de
plantearse en serio la promoción de la zarzuela.
|
Hil,
|
¿Ahora? ¿Con la crisis?
|
Seb.
|
Sí señor. Ahora mismo, sin perder más tiempo.
|
Hil.
|
Créame, Don Sebastián, admiro su entusiasmo porque tal
como están las cosas, no sé si nuestro arte lírico está en condiciones de
levantar cabeza.
|
Seb.
|
No hablo de levantar la cabeza, sino de ponerse de pie y
empezar a andar de nuevo.
|
Hil,
|
¿Está usted bien? ¿Nota alguna presión en la nuca? ¿Ve usted con claridad? Ya sabe que si le
hace falta, en la botica …
|
Seb.
|
Nada de boticas, ni mejunjes. Mire usted: Esto de la
crisis es como un gran pedrusco en el camino contra el que hemos tropezado;
no lo hemos visto por ir mirando a otro lado y el batacazo ha sido
morrocotudo. Hemos caído de narices, y eso duele.
|
Hil.
|
¡Qué me va usted a contar! ¡No olvide que vivo de los
dolores!! De los dolores ajenos, se entiende.
|
CALLEJERO DE LA ZARZUELA - LA DEL MANOJO DE ROSAS
Sainete lírico en dos actos, escrito por Anselmo Cuadrado
Carreño y Francisco Ramos de Castro, con música de Pablo Sorozábal. Se estrenó
el 13 de noviembre de 1934, en el Teatro
Fuencarral, de Madrid.
La del manojo de
rosas, nació con la intención de salvar la temporada del Fuencarral, del
que entonces era empresario Emilio Sagi-Barba, pero recibió los más grandes
aplausos del público, las mejores opiniones de críticos y comentaristas, y se
convirtió en el sainete lírico representativo del siglo XX, como La verbena de la Paloma o La revoltosa lo son del XIX.
Tiene mucha música, y entre sus números destacan la romanzas
de la protagonista “No corté más que una rosa”, y la de Joaquín, su enamorado:
“Madrileña bonita”, en el segundo acto,.
En el terreno de los dúos, La del manojo de rosas, ofrece una buena cosecha: el de Ascensión y
Joaquín, “Hace tiempo que vengo al
taller”, al ritmo vibrante de un pasodoble; y el simpático diálogo–enfrentamiento
entre los dos pretendientes de Ascensión, Ricardo y Joaquín, “¿Quién es
usted?”. No pueden quedar sin cita el
dúo cómico entre Clarita y Capó, “Tienes que ser dócil”, del primer acto y el impresionante “Chinochilla de mi charniqué”, en el segundo,
en el que el pobre Capó, haciendo un alarde de pundonor para oponerse al
sabihondo Espasa, canta en caló. El sainete se cierra, prácticamente, con otro
dúo de Ascensión y Joaquín, “¿Está esto muy bajo?.... Qué tiempos aquellos”.
Una curiosidad: Se estrenó en martes y 13.
Solicitamos su colaboración, para
corregirnos si hemos cometido errores y aumentar el número de estas calles
zarzueleras si hemos omitido alguna.
viernes, 8 de noviembre de 2013
HOMENAJE A LÓPEZ TORREGROSA
Tomás López Torregrosa (1863-1913) |
Romanzas y Dúos. (El primer reserva, Los falsos dioses, La
pena negra. El amor que huye, El refajo amarillo, El santo de la Isidra, ¡Armas al hombro!,
El recluta, San Juan de Luz, El galleguito, El palacio de cristal, La fiesta de
San Antón, El trabuco y La guardabarrera). Aida Rioja, soprano. José Julián Frontal, barítono. Isabel
Dombriz, piano. Sala Manuel de Falla (SGAE), 6-11-2013.
Al cumplirse ese año el primer
centenario de la muerte del director y compositor Tomás López Torregrosa
(Alicante, 1868–Madrid, 1913), uno de los fundadores de la Sociedad de Autores, la
actual entidad de gestión ha organizado un concierto de recuerdo y homenaje a
este músico muy popular en su tiempo pero hoy prácticamente desconocido.
Alumno de Chapí en el
Conservatorio madrileño y director de la orquesta del Teatro Apolo, escribió
más de un centenar de obras líricas, tanto en solitario como en colaboración
con otros autores, especialmente con Joaquín Valverde Sanjuán, el popular
Quinito, casi todas encuadrables en el género chico. Entre ellas destacaron El santo de la Isidra, El pobre Valbuena,
La fiesta de San Antón y El terrible
Pérez.
miércoles, 6 de noviembre de 2013
LOS CELOS: ENFERMEDAD Y REMEDIO
Escena de Los amores de la Inés - T. Zarzuela 2013 |
Los amores de la Inés (Sainete lírico en un acto, de Emilio Dugi.
Música de Manuel de Falla). S. Cordón; P. Gracia; M. Peidró; E. Ferrer; S.
Airiño; J. C. Martín. La verbena de la Paloma (Zarzuela[1] en
un acto, de Ricardo de la
Vega. Música de Tomás Bretón). M. Rey-Yoly; M. Abascal; A.
Font; E. Baquerizo; E. Sánchez; D. del Castillo; S. Airiño. Coro del Teatro de la Zarzuela. Orquesta
de la Comunidad
de Madrid. Dirección de escena: José Carlos Plaza. Director musical: Cristóbal
Soler. Teatro de la Zarzuela,
3-11-2013.
Aunque las dos obras del primer
programa de la temporada 2013-14 del Teatro de la Zarzuela, sean cercanas
en el tiempo (La verbena es de 1894 y Los amores de 1902), y sus autores musicales declararan su admiración
recíproca, lo que une a estas dos obras son, curiosamente, los celos, motor
fundamental en la historia del teatro cantado o no. Creo, sinceramente, que no
hay entre ambos sainetes otro punto de contacto, porque ni en lo literario, ni
en lo musical pueden establecerse comparaciones. Incluso en el tratamiento de
los celos también difieren: si en la obra de Bretón, son la base de la fuerza
dramática, en la de Falla son una herramienta para recuperar el amor.
Los amores de la Inés,
única de las cinco zarzuelas escritas por Falla que llegó a estrenarse, es
la obra de un joven en formación, que no ha encontrado un estilo definido y
que, para sobrevivir, se ve obligado a escribir el único tipo de música que en
aquellos años daba rendimientos económicos. Falla gustaba de la zarzuela,
especialmente del género chico; siempre declaró su admiración por Chueca, pero
no fue capaz de crear una obra que diera juego en ese terreno. Los amores de la Inés es floja, aunque
tiene detalles interesantes en el tratamiento de elementos populares, pero,
desde luego, ningún atisbo de lo que
será Falla sólo tres años después con La
vida breve.
lunes, 4 de noviembre de 2013
UNA ZARZUELA DEL SIGLO XXI
Las leyendas de Bécquer. (Zarzuela en un acto, de Lorenzo Moncloa y Carlos Crooke. Música de César Belda). H. Cardeña. L. Moncloa. C. Palomo. A. Castilla. C. Crooke. Director musical: C. Belda. Colegio Sagrada Familia, de Madrid, 28-10-2013.
He tenido ocasión de ver y
escuchar esta nueva zaruela del siglo XXI en una representación ofrecida con
evidente intencionalidad didáctica que debo explicar a quienes lean estas
líneas. Se pretendía llevar a un numeroso grupo de estudiantes, de entre unos 13 a 17 años, el teatro, el
teatro lírico, más concretamente, y el mundo romántico de Bécquer. Todo ello
con la esperanza de que algunos, después de esta experiencia, se acerquen al
teatro, al teatro musical y al más grande de nuestros poetas románticos. Toda
una experiencia, la primera para muchos de ellos.
Me ha parecido que la
representación les ha interesado, al menos la han seguido con interés y
respeto, aunque la concentración se perdió –como es lógico– cuando en un
determinado momento, reconocieron entre los actores a media docena de sus
compañeros.
¿Se habrán conseguido los
objetivos? El tiempo lo dirá, pero es muy probable que algunos de estos
muchachos haya quedado “enganchado” por el teatro, por la música o por la
poesía.
domingo, 3 de noviembre de 2013
EL ESPIA
Pensamientos de un
barbero.
Me acabo de enterar y no doy crédito. Me lo ha dicho un
cliente y me he quedado de piedra. Está visto que la vida está llena de
sorpresas.
¡Nos ha espiado! ¡A todos! ¡Un país amigo! ¡Increíble,
inaudito, insospechado, inverosímil, insólito, imprevisto, inadmisible,
indigno, inexplicable…! ¡Todo lo que empieza por “in”, menos imposible o
improbable!
¡Nos ha espiado! ¡Vaya novedad! Cóleras teatrales aparte,
aquí, desde que el mundo es mundo, todos espiamos a todos. O a los que podemos.
Conocer de antemano lo que piensan o planean hacer otros, es consustancial al
ser humano. A veces nos interesa saber cosas de los demás sólo por curiosidad,
otras por interés, algunas por necesidad y no pocas por obligación.
CALLEJERO DE LA ZARZUELA - LA CORTE DE FARAÓN
Opereta bíblica en un acto, escrita por Guillermo Perrín y
Miguel de Palacios, con música de Vicente Lleó. Se estrenó el 21 de enero de
1908, en el Teatro Eslava, de Madrid.
Se acusa a La corte de
faraón de ser subida de tono e irreverente. Por estas razones fue prohibida
durante la dictadura franquista y hasta 1976 no estuvo, de nuevo, sobre un
escenario español en su versión original. La realidad es que la página creada
por Perrín y Palacios, sugiere sin herir, y sólo quien conoce de qué va el
asunto, está en condiciones de advertir ese doble sentido que posee. En
cualquier caso, "La corte de Faraón", no es ordinaria, ni grosera, ni
mucho menos, obscena; sí es picara y con una doble intencionalidad tan
innegable como elegante.
Página brillante ofrece momentos como la fanfarria inicial
(“¡Victoria! ¡Victoria!”), el lírico canto de Lota, (“De Tebas soy yo, en Tebas
nací”), el melodioso saludo que hace Putifar a su futura esposa (“Salve Lota”),
el “Terceto” entre Lota, la
Reina y José a ritmo de vals (“Para juzgar y sentenciar”) el
vibrante garrotín final (“Vi entre sueños tres mujeres”), o el jocoso dúo de
José y Lota (“Yo soy el Casto”). No podemos olvidar, claro está el Coro de
Viudas (“Salud a la doncella”), de un erotismo poco frecuente en la zarzuela,
que, sin embargo, no es fácil advertir a la primera y, sobre todo, los
famosísimos cuplés babilónicos (“Ay ba! Ay ba! Ay ba!”), popularísimos desde
el primer día.
LA CORTE DE FARAÓN tiene su calle en Madrid, en la Ciudad de los Ángeles.
Solicitamos su colaboración, para
corregirnos si hemos cometido errores y aumentar el número de estas calles
zarzueleras si hemos omitido alguna.
sábado, 2 de noviembre de 2013
EL PARTIDO ZARZUELERO
Seb.
|
Buenos días, Don Hilarión.
|
Hil,
|
Buenos días, Don Sebastián. Le he traído estas píldoras …
|
Seb.
|
¿Unas píldoras? ¿Por qué? No tengo dolor alguno, ni
molestias; vamos que me encuentro como un muchacho.
|
Hil.
|
Ya lo veo. Es sólo por precaución. Por si le da un
acelerón a su motor, o sea una taquicardia. O se le juntan el aire y la
saliva en el conducto traqueal y entra usted en un episodio espasmódico.
|
Seb.
|
¡Don Hilarión! ¿Qué ocurre? ¿Me trae usted algún suceso
irreversible y fatal?
|
Hil,
|
Nada de eso, todo lo contrario. Le traigo una gran
noticia: Ya sé cómo solucionar el futuro de la zarzuela.
|
Seb.
|
¿El futuro de la zarzuela? ¡Pero eso es estupendo! Y,
dígame, ¿cómo?
|
Hil.
|
Ahora viene lo peligroso… ¡Creando un partido político!
|
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